Invertir en Computación Cuántica: ¿la próxima gran oportunidad?

Exploremos una nueva tecnología revolucionaria que hoy puede no parecer claramente “invertible”, pero que en la próxima década podría convertirse en un verdadero punto de inflexión y ofrecer un potencial significativo de rentabilidad para los inversores: la computación cuántica. En este artículo analizamos la inversión en computación cuántica en 2025.

Hablamos a diario con inversores y lo que hemos observado recientemente es sencillo: todos sienten curiosidad por “la próxima gran tendencia”, pero quieren entender qué es real, qué es una moda pasajera y qué riesgos asumen cuando invierten en una fase temprana.

En los últimos días, varios clientes nos han preguntado: “He visto algo sobre computación cuántica en las noticias y dicen que es el futuro de los ordenadores. ¿Puedo invertir en ello?” La respuesta suele ser: sí, puede invertir en acciones de las empresas que están detrás de esta tecnología o adquirir una cesta de compañías que desarrollan computación cuántica a través de un fondo cotizado (ETF). Veámoslo con más detalle.

¿Cómo funcionan los ordenadores cuánticos?

Los ordenadores tradicionales procesan la información utilizando bits, que solo pueden tomar el valor 0 o 1. Esta es la base de casi todo lo digital: teléfonos móviles, ordenadores portátiles, servidores en la nube, modelos de IA y los centros de datos que impulsan el internet moderno.

Los ordenadores cuánticos utilizan qubits. Un qubit se comporta de forma distinta a un bit tradicional porque, bajo ciertas condiciones, puede representar una combinación de estados (a menudo se explica como estar en “0 y 1 al mismo tiempo”, aunque la realidad práctica es algo más compleja). La conclusión clave para los inversores es la siguiente:

La computación cuántica no es “un portátil más rápido”. Es una forma distinta de computación que puede ser extraordinariamente eficaz para determinados tipos de problemas.

Los ordenadores cuánticos se están desarrollando porque existen categorías de problemas que, a escala útil, se vuelven rápidamente imposibles para los ordenadores clásicos, incluso con enormes capacidades de cálculo.

Algunos ámbitos en los que la computación cuántica podría aportar un gran valor son:

• Química y ciencia de materiales: simulación más precisa de moléculas y reacciones (con posibles aplicaciones en baterías, catalizadores y materiales industriales).

• Descubrimiento de fármacos e investigación biomédica: aceleración de determinadas fases del proceso mediante mejores simulaciones y optimización.

• Problemas de optimización: logística compleja, rutas, planificación y optimización de carteras (no está garantizado, pero es un área clave de investigación).

• Ciberseguridad y criptografía: a largo plazo, el desafío a algunos métodos de cifrado ampliamente utilizados y el impulso hacia la criptografía post-cuántica.

Las limitaciones de la computación cuántica

Las máquinas cuánticas requieren entornos extremadamente controlados. Muchas de las aproximaciones más avanzadas necesitan temperaturas ultrabajas (cercanas al cero absoluto), hardware especializado y una infraestructura física considerable. Esta es una de las razones por las que la computación cuántica sigue estando en gran medida en fase de investigación y desarrollo, con una adopción comercial limitada.

Esto nos lleva a la realidad para el inversor: los plazos importan. La mayoría de las empresas centradas en computación cuántica no se valoran hoy como negocios maduros. Sus valoraciones se basan en el potencial futuro, los hitos tecnológicos, las alianzas estratégicas y la probabilidad de una adopción comercial a largo plazo.

Si le interesan las tecnologías de futuro con grandes oportunidades de crecimiento para los inversores, le recomendamos también leer nuestro artículo: Por qué Elon Musk cree que los robots con IA serán su mayor producto hasta la fecha.

Invertir en computación cuántica

Existen dos vías habituales: acciones individuales o un ETF temático.

1) Acciones individuales

A continuación, presentamos tres ejemplos de acciones muy diferentes, disponibles para operar en nuestras plataformas de inversión online, con exposición directa al desarrollo de la computación cuántica:

• IonQ (IONQ:xnys)
  Frecuentemente asociada al desarrollo de la computación cuántica y a colaboraciones comerciales. El interés de los inversores se basa principalmente en las expectativas de crecimiento futuro, más que en la rentabilidad actual.
• Rigetti Computing (RGTI:xnas)
  Una empresa de menor tamaño, normalmente considerada en una fase más temprana y con un perfil más especulativo.
• IBM (IBM:xnys)
  Un perfil de riesgo muy distinto: una compañía consolidada con múltiples fuentes de ingresos, donde la computación cuántica forma parte de una estrategia más amplia (cloud, software y servicios empresariales, infraestructura). Para muchos inversores, esta es una forma de obtener exposición indirecta manteniéndose en una empresa rentable y diversificada.

Conclusión para el inversor: estas opciones no son comparables de forma directa. Se trata de elegir entre exposición temprana (mayor potencial al alza y a la baja) y empresas consolidadas (menor “pure play”, pero potencialmente menos volatilidad ligada a titulares sobre computación cuántica).

2) Un ETF de computación cuántica

Si no desea asumir el riesgo de una sola empresa, un fondo cotizado (Exchange-Traded Fund, o «ETF») temático de computación cuántica puede ser una opción práctica para comenzar. Los inversores pueden fijarse en ETF disponibles en nuestras plataformas de trading, como:

• VanEck Quantum Computing UCITS ETF (QNTM:xmil); o

• WisdomTree Quantum Computing UCITS ETF (WQTM:xetr).

No obstante, se aplica la misma advertencia: los ETF temáticos pueden ser volátiles y sus carteras suelen incluir empresas que solo están parcialmente vinculadas a la computación cuántica (proveedores de hardware, infraestructura IT, software, semiconductores, etc.). Por tanto, el inversor también asume riesgos no directamente relacionados con la computación cuántica.

Si opta por un ETF, un enfoque prudente suele ser:

• mantener un tamaño de posición moderado,

• asumir que la volatilidad será elevada,

• y realizar entradas escalonadas en el tiempo en lugar de intentar acertar un único punto de entrada perfecto.

Esta conversación sobre el futuro de la infraestructura tecnológica también plantea una cuestión clave: ¿qué protegerá estos sistemas frente al espionaje empresarial y los ciberataques? Si le interesa la respuesta y las oportunidades que puede generar para los inversores, le recomendamos leer nuestro artículo: Crisis de Ciberseguridad: ¿Cómo Pueden los Inversores Beneficiarse?

Riesgos al invertir en computación cuántica

La computación cuántica es atractiva, pero no es una temática de inversión con una trayectoria garantizada. Los principales riesgos son:

• Riesgo de comercialización: demostraciones impresionantes no siempre se traducen en productos escalables y comercializables.

• Riesgo de plazos: los avances pueden tardar más de lo que espera el mercado.

• Riesgo tecnológico: existen múltiples enfoques técnicos y no todos tendrán éxito.

• Riesgo de valoración: muchas empresas de computación cuántica cotizan más por la narrativa que por los fundamentales, con valoraciones muy exigentes.

• Riesgo de dilución y financiación: las empresas en fases tempranas suelen recurrir de forma recurrente a ampliaciones de capital.

Las tecnologías de futuro como la computación cuántica suelen acaparar titulares, pero si le interesa conocer otra tendencia más silenciosa, todavía poco descubierta por los inversores y que podría representar una gran oportunidad de rentabilidad, le recomendamos leer nuestro análisis: Investing in Longevity/Anti-ageing Stocks: a $38 Trillion Opportunity.

La conclusión para los inversores

La computación cuántica puede redefinir lo que los ordenadores son capaces de hacer en determinados sectores y es una de las tecnologías que los inversores deberían seguir de cerca, especialmente a medida que crece la demanda de potencia de cálculo junto con la IA, la robótica, la ciberseguridad y la fabricación avanzada.

Sin embargo, todavía es pronto. Para la mayoría de los inversores a largo plazo, esta temática encaja mejor como una asignación temática de alta volatilidad para ganar exposición, y no como un pilar central de la cartera.